BUKHARA

15 de mayo de 2015

Bukhara, Bujara, Buxoro.

Un sabio dijo: “Si Samarkanda es la belleza de la tierra, Bukhara es la belleza del espíritu“.

¡Otra de las grandes ciudades en la Ruta de la Seda! 
Importante nudo de comunicaciones, fue una parada esencial al estar en mitad de extensos y duros desiertos. 
Por tanto, arribar aquí era lo mismo que alcanzar un oasis, con la ansiedad de por fin encontrar un lugar acogedor para pernoctar y, sobre todo, ¡conseguir agua!

Lyabi Hauz

Para ello se ideó un ingenioso sistema hidráulico que permitió la vida en estas áridas latitudes. Con múltiples canales y estanques que recogían el agua de lluvia y las subterráneas. Aunque con el agravante de que al no limpiarla con asiduidad y estancarse provocó fatales plagas, sobre todo en el XIX. 

Los rusos modernizaron y drenaron esa red. 
Hoy quedan varios de esos estanques siendo el más destacado el de Lyabi Hauz  
             
Así que Bukhara fue una CIUDAD-OASIS

También CIUDAD-SANTA: ya que fue capital del REINO SAMÁNIDA (siglo IX-X) Una dinastía de emires persas cuyo imperio se extendió desde Mongolia al actual Pakistán, hasta que en 1220 llegaron las huestes de Gengis Khan.
Los samánidas convirtieron Bukhara en Ciudad Santa, calificándola como “Pilar del islam”. Por esto contenía más de trescientas mezquitas (es conocido el dicho: “una mezquita para cada día del año”) y un centenar de madrasas, pero tras la caída del último emir y el paso de los rusos esa sacralidad quedó aminorada. Aunque sigue conservando numerosas mezquitas y madrasas 


Y también CIUDAD-SABIA: En ella recalaron los más excelsos físicos, médicos, astrónomos, filósofos… Su máximo exponente: Ibn Sina (Avicena)          

¡Esas “tres ciudades”: oasis, santa y sabia,  vamos a descubrir!


Llegamos desde Samarcanda visitando de camino Sharishabz. 
Para ello hicimos uso de un taxi-monovolumen privado, contratado a través del hotel Karavan Serail de Samarcanda. Partimos a 9h, visitamos largamente Sharishsabz, comimos en la localidad de Qasi y llegamos a Bukhara a 19´45h. 

ALOJAMIENTO:
Hotel MINZIFA en la zona de Lyabi Hauz (el estanque)
C/Eshoni 63st-Tf-998652245628 

hotel minzifa

                     

Tras atravesar un gran portón se pasaba a un patio rodeado de un bonito edificio
de doble planta, con la fachada decorada a la uzbeka.
Las habitaciones igualmente en ese estilo eran muy originales. Con un baño moderno, tv, wifi. secador. 20€pp   

En este área, en el interior de la ciudad antigua, había una gran variedad de hoteles boutique. Todos con gran encanto y una arquitectura tradicional.
Y tal que llegamos dimos un PASEO NOCTURNO POR BUKHARA

Era una ciudad pequeña,
perfecta para recorrer a pie. 

Todo se ubicaba a lo largo de una
línea
de 1´5km que la atravesaba longitudinalmente. 
En un extremo quedaban los
mausoleos y la fortaleza, 
al otro Chor Minor. 
En medio maravillas como Lyabi Hauz (el estanque) o el complejo del Kalon con su mezquita, su madrasa y su
icónico minarete

Ya esa misma noche Bukhara nos ganó y lo que iba a ser sólo un breve paseo para tomarle el pulso se nos fue alargando, ante la magia de Lyabi Hauz y sus madrasas, el conjunto del Kalon, los bazares, la fortaleza…  Todo ello, además, empapado por la luz de una luna llena.

Cenamos en el restaurante Chinar, cercano a nuestro hotel-59000som/6p-2´6€pp

10DIC:
UN PASEO POR BUKHARA

Nuestro hotel Minzifa estaba situado en LA CIUDAD VIEJA,  un laberinto de callejas estrechas,
con pavimento de tierra,  y unas casas ancestrales
enjalbegadas y generalmente con unas puertas de color azul. 

Rápidamente
salimos a una avenida que discurría longitudinalmente ensartando la ciudad.

Primero nos
encaminamos en dirección a Chor Minor, escondida 
en una barriada que más se asemejaba a un
pueblito.
 
En una plaza rectangular se hallaba un estanque y esta construcción, con 4 simétricos minaretes a cada esquina.  

El nombre significaba, eso: 4 minaretes. 
Fue la puerta de entrada a una madrasa alzada en el 1807. 
¡Y
si así de atractiva era su entrada, ¿cómo debió ser el resto?! 

Entrada 2000som-0´8€
En su zaguán había una tienda de
souvenirs. 
Desde ahí se ascendía a la 2ª planta y a uno de los minaretes.
Por
entre esas callejas nos trasladamos al núcleo de Bukhara.

No tardamos en alcanzar la plaza LYABI HAUZ con su estanque central 
(Lyab-i-Hauz
significa: “Alrededor del estanque”), 
Allí también dos magníficas madrasas
y la kanakha.  

Estando en ese lugar tu imaginación te hacía verte formando parte de esa caravana que partió ya hacía muchos meses desde Europa o China, atravesando montañas, valles, ríos, y ahora
ese desierto uzbeko. Y en medio de él encontraste esta ciudad de ensueño, con
sus minaretes, sus palacios, madrasas y aquellos estanques que, por fín, te
permitían abrevar y descansar tras tantas duras jornadas. También comerciar e intercambiar conocimientos y costumbres.
Porque  alrededor de Lyabi Hauz
había caravansares, chaikanas para comer, bazares para comerciar… 

En memoria de esas caravanas, a orillas del estanque había una
escultura formada por varios camellos y su guía. 

Al este de la plaza se alzaba la madrasa Nadir Divanbegi,
de 1622, 

madrasa Nadir Divanbegi

Sobre su pishtak (puerta de entrada) se
dibujaban dos aves del paraíso que entre sus garras portaban un jabalín. (De nuevo saltándose
la tradición islámica de no pintar personas o animales en un lugar
religioso). 

Su interior estaba formado por múltiples celdas
alrededor del patio.




Enfrente quedaba la khanaka Nadir Divanbegi, de
la misma época. 
En su caso fue un importante centro sufí donde realizaban sus
ceremonias y se reunían para estudiar y debatir. 

kanakha

La plaza quedaba cerrada por la MADRASA
KULKEDASH.
De 1568. 

Fue la más grande escuela islámica de Asia Central.        
El nombre se debía al general Kulbaba Kukeldash, hombre fuerte en
aquellos momentos del khan Abdullah.

Kulkedash

Por detrás de esta plaza de Lyabi Hauz vimos unas ruinas. Esa era la parte más antigua de
Bukhara
. En ella se habían descubierto los restos de un templo zoroastrico que
se remontaba al siglo V, después se alzó una mezquita que la leyenda cuenta que sobrevivió
a los ataques mongoles porque la ocultaron enteramente bajo arena.    
 


Bukhara no daba tregua. Inmediatamente nos topamos con otro espacio
sublime, formado por dos madrasas, enfrentadas una
a otra.
Una era la Madraza del Khan Abdul Azizov. 


Enfrente la de Ulugh Beg que era la más antigua, de 1417


Madrasa de Azizov frente la de Ulugh Beg
Contigua
a esas madrasas atravesamos el bazar cubierto cuyo techo, 
con sus múltiples cúpulas redondas, se asemejaba a una huevera     

el bazar cubierto

En ese bazar descubrimos babuchas, lámparas de Aladino, alfombras, orfebrería, marquetería, las graciosas marionetas uzbekas… 
  

típicas marionetas uzbekas

Nada más salir de él lo siguiente fue el COMPLEJO POI KALON, formado por una mezquita, una madrasa
(Mir-i-Arab) y un alto alminar, del XII.  
    

 Kalon significaba “grande”.  Y este adjetivo iba perfecto al altivo minarete que con sus 48m fue el faro de la ruta de la
seda
Su fuego, divisable desde la lejanía, guiaba a las caravanas a través del desierto. 

Hecho en ladrillo visto, en anillos, hasta lo alto que era una corona con 16 ventanas desde donde se podía divisar a cada punto cardinal.


Pero no sólo se usó como torre-vigía, también tenía un pasado más truculento pues desde él se arrojaban a los condenados a muerte.

A un lado estaba la MEZQUITA, la segunda más
grande de Asia Central (tras Bibi Khanum en Samarcanda) 
En su interior su cúpula era otra de esas insignias de Bukhara,
primorosamente decorada.

El conjunto se completaba con la MADRASA MIR-I-ARAB que
significaba “príncipe de los árabes”


Entre el Kalon y la fortaleza, ese tramo de 400m estaba ocupado por LOS ZOCOS DE BUJARA que llevaban funcionando desde hacía siglos. 


Sus nombres se debían a los gremios que los ocupaban. Tres eran los más
destacados:

+ TAQI SARRAFON: “Zoco de los
cambiadores de dinero”.    
En su época tuvieron gran importancia pues recibían a las caravanas que
arribaban desde todos los confines y precisaban la moneda local. Hoy sus
puestos estaban ocupados por vendedores de telas, souvenirs, gorros,
artesanías…


+ TAQI ZARGARON: “Zoco de los
joyeros”
Mejor sería decir de las joyerAs, pues eran ellas quienes se ocupaban de continuar mercadeando con oro, plata y piedras
preciosas. En su muestrario:  anillos,
brazaletes, pendientes…  

suq de los joyeros

+ TAQI TELPAK FURUSHON: de los afamados tejedores de alfombras
Unas obras de arte. Algunas enormes.

suq de las alfombras


Salimos a una despejada explanada donde se alzaba una impresionante muralla.

muralla de la fortaleza

 Protegía a: ARK: LA FORTALEZA-CIUDADELA
DE BUKHARA
Entrada, al ser grupo: 8000som/pp-2´3€ incluido un  guía.


Su origen se remontaba a un primer templo zoroástrico que fue convertido en
mezquita tras la llegada del Islam.
Después los khanes la adoptaron como palacio y cada uno lo fue remodelando a su capricho. 



Acogió a 3000personas    

En su interior estaba la mezquita del Viernes: Juma mosque. El hall de la coronación con el trono. Pequeños museos y tiendas de
souvenirs.  


Desde las almenas las vistas alrededor de Bukhara abarcaban muchos km. 

mezquita de palacio

A espaldas de la fortaleza estaba  ZINDON, (“vieja prisión”), una de las cárceles más
duras, reconvertida en museo.

Lugares como “el pozo
negro” hablaban de su crueldad. Ahí se arrojaban a los presos junto a
escorpiones, serpientes, sin luz ni víveres, hasta que agonizaban
Cruzando la avenida, enfrente de la fortaleza,  Bolo Hauz, la mezquita de
los pilares de madera.
 

mezquita de pilares madera

Desde ella entramos en EL PARQUE SAMANI donde se ubicaban dos  mausoleos:


-Chasma Ayub que significaba “El Pozo del Santo Job” quien hizo brotar ese
agua con su bastón. 

El pozo continuaba allí, en el centro del mausoleo, y
beber de él tenía propiedades curativas. 

mausoleo Chasma Ayub

-Ismail Saimoni  Fue uno de los más importantes khanes de la
dinastía samánida, quienes
 extendieron la religión musulmana y convirtieron en ciudad santa
a Bujara. 
Su mausoleo era un cubo de ladrillo dispuesto en unas intrincadas
figuras.

Desandamos nuestros pasos y de nuevo frente la fortaleza, en la avenida, tomamos el bus urbano 53 

en el bus 53

hasta el Karvon Bazar en las afueras de Bukhara. 

Un gran
mercado cubierto donde se mercadeaba con toda clase de productos. 
Nos compramos uno «muy útil»: ¡una bata
uzbeka! (YOMA)-30000som-9€

karvon bazar

Comimos en una chaikana (restaurante popular) en mitad del bazar: empanadas,
somsa, pinchos-10000som-2´6€  


Alrededor del bazar se apostaban los buses que iban a Urgenh, a Khiva etc 

Al
regresar en el 53 la fortaleza ¡había cambiado de aspecto! Por la incidencia de la luz, ahora la muralla era de un dorado
intenso. Lo mismo con las cúpulas que brillaban
más. 




Volvimos a pasar por el kalon y por esas madrasas que ahora refulgían. 
Descubríamos nuevos rincones y calles. La que unía el Kalon con Lyabi hauz perpendicularmente era de fábula. 




Allí
se ubicaba
el hammam histórico. 60000som-15€
con masaje, peeling y tes. 


Cenamos en la chaikana (restaurante) Ali Baba, situado en Samani
park. 140000som-6€pp

En las afueras de Bukhara:

El palacio de verano (bus 70) con
varios edificios alrededor de un patio ajardinado más el harem. Se conservaban los muebles, ropa y demás enseres del último emir.

-El mausoleo de Bajautdin Naqshbandi (bus 235) Otro complejo con una
mezquita, el mausoleo de este santo y el de su madre
TRASLADOS
DESDE BUKHARA:


-Para ir a la estación de tren
se tomaba el bus 268 al lado de Lyabi Hauz, frente al restaurante Chinar- 30min de
trayecto hasta el barrio de Kogon 
Sólo había tren a Samarcanda y Tashkent 



-Para ir a estación de buses
había que trasladarse al Karvon Bazar. Se tomaba el 53 frente a Ark, la fortaleza. 1500som 
No era una estación al uso. Alrededor del gran mercado había que buscar
donde paraban los buses. Lioso. 
Bus Bukhara-Urgenh-35000som-9´5€
Taxi privado
Bukhara-Khiva o Urgench-100$     

Ante lo
lioso de la estación de buses sita en el Karbon bazar, la poca frecuencia de
buses directos hasta Khiva, decidimos contratar dos taxis a través del
hotel. (Cada uno 80€)
.

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