ERDENET-Ascenso al volcan URAN TOGOO UUL-Acampada en la aldea de HUTAG ONDOOR:
lluvia de la noche había dejado el paisaje espejado, con lo cual era aún mas atractivo.
caballos y yaks, volver a dar una vuelta por el monasterio de Amarbayasgalant (los monjes no madrugaban. A las 10h se realizaba una ceremonia), desmontamos las tiendas, recogimos y partimos
a las 8´30h.
el pelo, ponerse una túnica roja y quedarse allí una temporada nos rondó. Aunque tanto silencio, tanta paz, ¡ya veríamos al tercer
día!… Por tanto, la decisión fue tomada: ¡proseguimos el periplo mongol! Yendo de Este a Oeste.
nos llevó a la localidad minera de ERDENET, a BULGAN y, al mediodía, para
estirar las piernas, hicimos una excursión ascendiendo al volcán URAN TOGOO UUL
cuyo cráter circunvalaremos. Por la tarde, a eso de las 19h, acampamos a
orillas del rio Moron en la pequeña aldea de HUTAG ONDOOR.
de anoche ese camino se había convertido en un barrizal que nuestra furgo-tanque
sorteó con suficiencia. No así otras más modernas, e incluso algun 4+4, que en
algún punto se quedaron varados. ¡Nosotros hubimos de ayudarles a salir del apuro
arrastrándolos!
CUENTA QUE HUBIMOS ACERTADO 100% CON NUESTRO MODELO.
cerca de Baruubüren que eran dos casas. Y ya sabemos: mongol y asfalto… ¡Sanaa enseguida se puso a 100km/h! Aunque siempre nos dio mucha confianza, le vimos muy seguro y
experimentado. Aunque un par de veces en el viaje hubimos de rebajarle la
euforia… Sobre todo si un 4+4 le adelantaba y él se picaba.
así se va amortizando ese puente) y a 11h llegamos a la localidad de EDERNET, de un tamaño
medio, con pisos a la soviética de 4-5 plantas
piso de los padres de Injer |
Tugra, Injer y Atuka |
ATUKA: LA HIJA DE
INJER:
los padres de Injer a los que les había dejado a la nieta para que la cuidaran.
nos importaba que fuera a visitarla, y cuanto tiempo quisiera. ¡Pero eso de que
nosotros nos fuéramos a dar una vuelta mientras ella la visitaba no lo aceptaron! Nos invitaron a esa casa, donde nos recibieron los encantadores abuelos y Atuka, la
hija. ¡Vaya terremoto! ¡Qué simpática y locuaz! Estaba con su primo Tugra.
Tenía unos 80m2. Con
su salón (el suelo alfombrado, mesilla, tv… En las paredes cuadros familiares
y de estampas religiosas), dos dormitorios, (el de Atuka con una litera, otro
con una gran cama de matrimonio), baño (wc, lavabo, ducha) y cocina (hornilla)…
el salón
|
la madre de Injer-cocina
|
Atuka estaba fascinada, no nos
dejó salir de su cuarto. Nos enseñó a su perrillo Boopy, igual de
terremoto, y también los múltiples peluches que tenía, entre ellos un
Epi que ella llama con otro nombre: Elmo.
enseñó lo más importante para una familia de Mongolia: el libro donde cada dia
apuntaba las vicisitudes de su clan, que luego llevaría al monasterio para que el
monje lo recitara y, con ello, le diera una buena bendición. Por ejemplo, escribía sobre Sanaa, para que condujera bien y no tuviera accidentes.
empanadas khusur. Y a esnifar un rapé llamado snuff.
todos a la puerta a despedirse.
atesorarlo por siempre.
despues alcanzamos BULGAN, de casas bajas, escampado.
DEL VOLCAN:
gasolinera que no difería de las nuestras a 15´30h entramos en el VALLE URAN TOGOO. Allí: Estepa. Verde. Gers.
Ganado.
Tras bordear una solitaria montaña pasamos a un bosque de coníferas
donde hicimos el picnic a la vez que extendimos para que se secaran las tiendas mojadas la noche anterior.
que ascendimos AL VOLCAN URAN TOGOO UUL.
volcán Uran Togoo Uul |
¡La montaña que habíamos
rodeado era el volcán! Con sus laderas cubiertas de hierba y árboles. (Toggo es
montaña. Uul-volcán).
por una marcada trocha, pero en 15min
estuvimos arriba. Las vistas eran infinitas, a un inmenso mar de hierba, surcado
por varios caminos que se perdían en la lejanía. ¡Mongolia en su esencia más pura!
sin límite vimos un solitario ger, con su aledaño vallado para el ganado. ¡El
mongol tiene todo el país para plantar su casa donde le plazca!
ese cráter. El interior estaba totalmente extinguido, cubierto de vegetación.
ponernos en marcha para llegar 2h despues al pueblo de HUTAG
ONDOR donde a su salida acampamos a orillas del río, entre un paisaje
de postal.
Se prescribía un baño al
atardecer. El río estaba turbio por los sedimentos y la corriente era fuerte pero
el agua estaba de muerte. No tenía mucha
profundidad. Lo genial era tumbarse de espaldas y dejarse llevar, cómo te despistaras al poco estabas muchos metros abajo.
Preferimos acampar por libre. Montamos las tiendas,
encendimos un fuego, la cena esta noche fueron unos tallarines a la mongola. Ummm.
bareto del pueblo (parecía un chiringo del Oeste) Las cervezas de medio litro a
1200Tg
genial. Desayuno, desmontar el campamento y partimos a 8´30h.
estepas, deteniéndonos según se nos antojaba, por ejemplo a charlar con un grupo de pastores nómadas ataviados con el dheel
y en sus manos la urga, (fusta) Ufanos,, encabritaron sus monturas y las pusieron a
dos patas, para demostrarnos sus excelentes habilidades como jinetes.
en un guanz (cantina). Sopas, dos tipos
de ternera, cordero, agua, cervezas y una especie de mosto llamado ushú (se
cogía de un cubo, a discreción, lo mismo que el té) Todo boniiisimo. 17700Tg
(Sanaa e Injer siempre estaban invitados por nosotros) 2€pp
prosiguió por carriles de tierra y 90min despues alcanzamos MORON,
capital de provincia.
donde se ubican los edificios gubernamentales, las escuelas, hospitales y el
gran mercado).
llegada a Moron |
Moron era una localidad grande. De
casas bajas, casi todas de madera, con tejados de colores, sobre todo verdes y
rojos. Con su estadio, su templo. ..
genial y populoso MERCADO. Con varias calles repletas de todo tipo de puestos.
Ademas de carnes, frutas, verduras… muebles,
tan típicos, con sus vivos colores, o los armazones de los gers,
y calzado,
sombreros, dheels (la “batamanta” mongola),
Y entre todo ello nos cruzamos con
gentes de diversas etnias mongolas: buriatos, darshans…
buena idea!: ¡recorrer aquellas pistas mongolas encajado en un sidecar!)
públicos. Y una vez en éstas puedes recurrir a este otro transporte que suele
apostarse a la entrada del mercado para desplazarte a sitios más remotos.
(regresariamos dos dias despues, tras acampar en el área del PN del lago
Khosvol, y volveríamos a disfrutar enormemente de ese mercado)
al PARQUE NAL DEL LAGO KHOVSGOL.
entrada al parque nacional, antes de llegar a Khatgal, en otro de esos parajes
de ensueño. Vecinos a una familia nómada. Inje era el padre y Chinjé su hija, de
15 años.
cría a un poste, entonces esa yak no se separaba de él. Taburete y cubo completaban
los útiles de esta faena)
Mientras, su padre los esquilaba con unas grandes
tijeras y gran habilidad.
Con la ayuda de Injer, nuestra intérprete, no tuvimos problema de comunicación,
pero es que, además, Chinjé sabía inglés. Nos mostró sus libros. En los
inviernos se trasladaba a Moron e iba a la escuela en régimen de internado.
Coqueta, ya acabadas sus
tareas, Chinjé cambió su atuendo de trabajar en el campo por unos vaqueros a la
última, una sudadera y zapatillas de deporte (¡en las estepas también se
está a la moda!)
Sentados sobre lo que a la noche sería la cama, nos contó historias de su quehacer diario, nos enseñó sus hobbies: la pintura y bordados
(nos regaló uno)…
Pasamos otra de esas veladas que por siempre retendremos.
A las 10´30h nos fuimos a dormir a
nuestras respectivas tiendas. ¡Con los ronquidos de los yak!
Chinjé nos muestra su casa |
de cabras, ovejas y yaks.
familia. ¡Allí nos habían puesto de todo!: leche recién ordeñada, pastas, pan, queso,
yogur, tostadas hechas sobre la estufa…
de tan fabulosa gente.
el trayecto que nos quedaba hasta el lago Khovsgol. ¡La gran perla azul de Mongolia!
masa de agua rodeada de una naturaleza y habitada por buriatos, urian-khais,
khotgoids, darkhads, y los tsaatan que son
los que comercian y montan sobre los renos (viven aislados en una reserva a
50km más al norte del parque, a la que es complicado acceder, pero que, según
la época, bajan al lago para comerciar).
lago Khovsghol |
bosques, vadeando ríos. Por un bonito camino forestal para llegar a media
mañana (11´20h) al lago Khovsgol.
considerar pueblo, simplemente eras un conjunto de casas y gers situados en línea a
lo largo de la pista paralela a la orilla del lago.
Había varios ger camps, alguno,
como el Natures ondoor, con un nivel más alto a los hasta ahora visto,
¡hasta se podía considerar de lujo! Poseía una buena
cafetería y duchas de agua caliente.
camp familiar vecino al Natures e ir a este para tomar algo en su cafetería y darnos esa ducha (3000Tg-2€pp)
nuestro ger camp |
Nuestro ger camp se componía de la casa de nuestros anfitriones, de
madera, con dos plantas, y cuatro gers a su alrededor. Estos por enseres únicamente
tenían la estufa central y 3-4 camas arrinconadas a la pared de fieltro y
decoradas con coloridos tapices. Igualmente el suelo estaba alfombrado. El baño había una letrina y, si no, ¡teníamos todo el bosque que nos circundaba!
rojos por la intemperie, el pelo desgreñado, y en su boca ¡esas sonrisas que son únicas de Mongolia! Eran los traviesos y divertidos hijos de nuestro casero.
La timidez enseguida se la hicimos desaparecer y ya les tuvimos colándose en el
ger y jugando con nosotros.
bosque.
En medio de un prado vimos una serrería como las de hace siglos,
valiéndose más del ingenio para cortar los largos troncos o para darle forma
circular y con ello poder hacer la rueda de un carro (le iban dando la forma redonda introduciendo cuñas).
en nuestro ger donde Injer nos recibió con una nueva y exquisita muestra de la gastronomia
de su país: unos fideos a la mongola deliciosos. Y de postre un yogur que más
natural era imposible.
RENOS:
trasladamos en la furgo unos 3km, hasta UN POBLADO TSAATAN que había descendido de sus montañas y se habían instalado por unos días a orillas del lago. A la salida de Toilogt.
donde habían plantado sus singulares viviendas a modo de tipi. Dentro sus muebles se limitaban a un arcón, con sus enseres y ajuar amontonado en un rincón; una hoguera en el centro; y lo más significativo eran sus curiosos altares
chamanistas, con calaveras de animales, cintas de oración…
rebaños de renos. Totalmente domesticados. Para esto los tsaatan eran unos
expertos. Incluso montaban sobre ellos.
la venta objetos tallados con las astas de esos renos.
nos fuimos al Natures ondoor. En su recepción pagamos por una ducha caliente (3000Tg,
unos 2€pp. Porque lo de tener caldera es un lujo para estos lares). y nos fuimos a tomar unos
chocolates en la cafeteria, con su amplio ventanal y vistas al lago. 14000Tg/5
Natures Ondoor ger camp |
A 20h regresamos a nuestro ger.
La cena fue un plato con un cereal parecido a la
quinua.
Nuestra puerta abierta era el marco de un poderoso cuadro: al fondo teníamos el lago, por delante su
tapizada orilla, de verde, y sobre esta cuando no aparecía un soñoliento yak, era un crio
ataviado con un dheel, o un jinete cabalgando…
Charleta al fuego del ger, un
vaso de leche fresca de yak y a 22´30h
nuestras camas nos reclamaron.
y su mercado-Jargalant
rebanadas sobre nuestra estufa, para así tener unas tostadas. Nos
enseñaron a hacer la mantequilla, batiendo energicamente la leche ¡de yak! Junto a
mermelada igualmente casera. Un desayuno sanísimo.
nos trasladamos a su parte nueva, con calles asfaltadas y con mejores
edificios, entre ellos el hospital.
hospital. Unas sopas gigantes que llevaban cordero, patata,
verduras+albondigones (tefteni tsuivan)+pasta+ternera (gulyash) De beber ese
zumo de uva y el té salado “ad libitum”, y agua. 16000Tg-2€pp!!!!!
giro en la orientación de nuestro viaje. Estos días habíamos estado por el Norte
atravesándolo de Este a Oeste, desde Amarbayasgalant al lago Khosvgol. Ahora
nuestra brújula ponía su fiel hacia el Sur, en diagonal, dirección Ulan Baator.
Después sobrepasaríamos la línea de la capital y nos adentraríamos en la 3ª parte
del viaje: las tierras del sur, completamente diferentes, dominadas por el
desierto del Gobi.
rumbo Sureste.
montaña coronado por uno de esos ovoos. Saltamos de valle en valle, por pistas
que nuestra furgoneta seguía sorteando con gran soltura.
hizo largo, ¡daba igual que circuláramos por esas pistas de tierra (o incluso campo
a través), o las horas de trayecto!, esos
paisajes tan auténticos nos tenían hipnotizados.
orilla contraria a la que se alza el pueblo, 200m antes de atravesar el singular
puente de madera, (hecho con troncos y tablas unas sobre otras, sin ningún
estudio de ingeniería).
el puente |
En un santiamén tuvimos realizadas las tareas: Montar tiendas,
buscar leña, hacer fogata, baño en el rio, montar mesa y sillas…
jardinera+carne en salsa+yogur con melocotón+airak (¡leche de yegua fermentada!
Era agria y fuerte.
manada de yaks cruzando el rio |
perrillo de las praderas |
Sanaa nos hizo una
demostración de cómo cazar un perrillo de las praderas, o una comadreja, o una
marmota. Intrigados, estábamos expectantes por saber su técnica. Se trataba de descubrir las diversas entradas de su madriguera, taponarlas con una piedra y dejar sólo dos abiertas.
Entonces llegaba la parte cruel del asunto: por uno de esos agujeros se echaba agua, inundando entonces la madriguera, y por el otro se aguardaba la salida del
animal desesperado por ponerse a salvo y meterlo en una jaula o darle un
estacazo. Evidentemente no ibamos a dejar que arrease el leñazo. (Injer menos
aún) Así que abortamos la caza.
mirándonos con la misma sorpresa que nosotros a ellos.
una apacible y pequeña localidad, destartalada pero con encanto. Con un
estadio, un templo.
templo Jargalant |
En uno de los colmados donde se vendía de todo adquirimos un
violin mongol de decoración: el khussuur (10000Tg) (Tiene un arco y se toca sentado, con el instrumento apoyado sobre la rodilla).
paisajes de esos de documental hasta TERKHIIN TSAGAAN NUUR, el gran
lago blanco.